En internet, hoy día, hay tantas mujeres como hombres. Pero esto no siempre ha sido así. Nosotras éramos solo un 25% de usuarias frente al 75% de hombres en 1997. Esto siguió así durante algunos años, y no fue hasta 2015 que nos convertimos en la mitad del total. Y solo hablamos de España. En otros países, o en este mismo pero en otros aspectos, la brecha digital entre unos y otras es abismal.

El feminismo nunca será cómodo. Nunca será fácil. El feminismo es revolución y justicia en un mundo falocéntrico, androcéntrico y masculino. El feminismo es vida que abre entre la podredumbre, y siempre escocerá en las heridas de los egos machitos heridos.